¿La soda cáustica limpia el aluminio reciclado?

La limpieza del aluminio suele ser una parte importante del reciclado posterior a la compra venta de chatarra en Valencia. Esta ingeniosa práctica, denominada "digestión", desencadena una serie de reacciones químicas que desempeñan un papel crucial en la obtención de aluminio reciclado de calidad. 

Obteniendo trozos de aluminio en material reciclado de alta pureza 

El proceso de digestión en sodio cáustico es una etapa fundamental en el reciclaje del aluminio, permitiendo la transformación de trozos limpios de este metal en material reciclado de alta pureza. En esta fase, los trozos de aluminio se sumergen estratégicamente en una solución de hidróxido de sodio, comúnmente conocida como soda cáustica, a elevadas temperaturas.  

La alta temperatura acelera las reacciones químicas, permitiendo una disolución eficiente de las impurezas. Durante la digestión, las impurezas se separan del aluminio, formando una solución que será posteriormente tratada y filtrada para eliminar cualquier material indeseado. 

El resultado de la digestión en sodio cáustico es un aluminio limpio y recubierto con hidróxido de aluminio, listo para pasar a las siguientes etapas del proceso de reciclaje. Este material reciclado de alta pureza se convierte en lingotes o bloques que alimentarán la producción de una amplia variedad de productos, desde envases hasta componentes de automóviles, cerrando así el ciclo del reciclaje del aluminio de manera eficiente y sostenible. La digestión en sodio cáustico destaca como una pieza clave en la contribución del reciclaje del aluminio a la preservación de recursos y la reducción de la huella ambiental.