El proceso de reciclaje de la chatarra

La compra de chatarra en Valencia permite que esta se pueda reciclar en centros especializados o en plantas de reciclaje. Una vez que la chatarra llega hasta aquí es cuando se inicia el proceso de recuperación y reciclaje propiamente dicho.

¿Cómo se lleva a cabo?

La chatarra puede clasificarse en dos grandes tipos:
  • Chatarra de metales ferrosos: Materiales procedentes del hierro y el acero. 
  • Chatarra de metales no ferrosos: Residuos de cobre, aluminio, estaño, plomo, zinc, níquel, etc. 
En muchas ocasiones, la chatarra no está del todo limpia. Generalmente, está compuesta por una mezcla de materiales no metálicos (plástico, madera, goma, etc.), por lo que resulta necesario retirar estos materiales del metal. Algo que suelen hacer a mano los operarios de las plantas de reciclaje o a través de las máquinas fragmentadoras.

La separación del metal de otros materiales tras la compra de chatarra nos permitirá obtener una forma casi pura de chatarra, objetivo principal del reciclaje.

Tras este proceso, las plantas de reciclaje suelen vender la chatarra a las fundiciones, que la emplearán como materia prima en los hornos. La temperatura exacta del horno variará en función del tipo de metal que se introduzca en él. La chatarra, por ejemplo, se funde hasta convertirla en líquido que se vierte en moldes para su uso en nuevos productos.

El reciclado de chatarra es un proceso muy importante dado el gran volumen de residuos metálicos que se generan en todo el mundo.